Victoria Domínguez. Combatir la siniestralidad laboral.
El presidente de la Junta de Extremadura, los sindicatos y la patronal han firmado el VII Plan de Prevención de Riesgos Laborales de Extremadura. Tendrá una vigencia de cuatro años y sustituye al VI que expiró en diciembre. Lo hacen meses después de que esta portavoz de Ciudadanos planteara ante la Asamblea de Extremadura una iniciativa que pedía al gobierno regional medidas frente a la creciente siniestralidad laboral registrada en Extremadura estos últimos años.
El balance del pasado año es desalentador. La siniestralidad laboral se cobró en Extremadura 17 vidas y registró 206 accidentados graves y muy graves. También destaca del 2015 el elevado índice de siniestralidad de sectores como la construcción y el repunte registrado por el sector agrario, algo que llama la atención en una comunidad autónoma como la nuestra.
Estos datos ponen de relieve que, en Extremadura, la prevención laboral deja mucho que desear, por lo que es preciso hacer todos los esfuerzos y más para que dejen de crecer, de año en año, como viene sucediendo. La prevención de riesgos laborales tiene que cobrar, con el nuevo plan firmado, un mayor protagonismo en el ámbito social y laboral para atajar esa sangría de vidas, de dramas personales y de recursos que consumen los accidentes laborales. No pueden permitirse más fracasos como los que ofrecen las estadísticas de los últimos años. Ni los planes de prevención que precedieron a este nuevo que ha sido rubricado.